Mendicidad

Señor ayúdame!
No me abandones,
Soy como un niño que apenas aprende a hablar,
Que apenas aprende a gatear,
Necesito que me sostengas,
Necesito que me guíes ,
Enseñame a caminar a tu lado,
Enséñame a decirte siempre que sí,
Enséñame a no tener miedo,
Enséñame a confiar en tu Palabra,
Enséñame a no desfallecer!

Sabes que sin tí soy sólo una masa endeble de piel y huesos que no puede sostenerse en pie,
Te ruego, mi Señor, no me abandones,
A suplicarte he venido Rey de Reyes,
A mendigar un poco de tu amor,
Un poco de tu misericordia,

Soy como un niño de brazos,
Que extraña el regazo de su Padre,

Ven Señor,
¡No te apartes de mi lado Yahveh!